SAMAÍN 2022 👻
La semana pasada los alumnos de 1° de la ESO prepararon unos cuentos terroríficos para leer en el aula y también fueron a pedir truco o trato a las clases de primaria. Casas encantadas, muertos vivientes, campamentos inquietantes, juguetes misteriosos...
Da gusto ver cómo se motivan en estas fechas para dejar volar su imaginación e intentar asustar a sus compañeros con las narraciones elaborados por ellos mismos.
Así mismo, compartieron la lectura de sus cuentos con los alumnos de primaria, practicando la lectura teatralizada de sus propios cuentos.
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LA PEOR CASA ENCANTADA
Erase un 31 de octubre:
Un grupo de amigas, salieron a pedir truco o trato; era una noche tranquila
donde se podían ver niños disfrazados, casas decoradas con telas de araña,
ataúdes, calderos, etc.
Estaban andando por el barrio y Zoe (una de las amigas) vio una casa del
terror, les avisó a sus dos amigas:
- ¡Hey chicas! ¿y si vamos a la casa encantada, así nos divertimos un rato?
(dijo con una sonrisa).
- Por qué no?- dijo Miriam dirigiéndose hacia la casa.
Estaban enfrente de la casa (era grande, con una puerta, 3 ventanas, un
tronco de madera, un ataúd y un jardín enorme) se abrió ante ellas la
puerta; María entró la primera.
-Está un poco sucio todo- dijo dando 3 pasos al frente.
(Miriam estaba observando una tumba que había en el jardín)
-Fijaos, pone “No molestar”-dijo señalando la tumba.
Zoe, empujó a Miriam hasta la casa; estaban subiendo las escaleras hasta
que se escuchó un portazo. Ellas, pensaron que era el viento y no le dieron
importancia.
En la segunda planta, vieron la estatua de un tipo de vampiro al lado de la
ventana.
No vieron nada interesante, solo había polvo y telas de araña se dirigieron
hasta la puerta, y de repente, escucharon una voz ronca decir:
- ¿Ya queréis iros? Si solo acaba de empezar…
Las tres chicas se giraron y allí estaba la supuesta estatua de vampiro.
Las tres empezaron a correr hacia la puerta, no se abría, así que decidieron
huir por las ventanas de la segunda planta. Corrieron, pero dejaron atrás a
su amiga Zoe, así que tuvieron que bajar a la primera planta. Ya no estaba,
las dos se preguntaron qué le había pasado a su mejor amiga.
- ¿Y si nos separamos y la buscamos? - dijo María
Miriam pensó que sería buena idea, entonces se separaron: María a la 1ª
planta, Miriam, 3ª planta. Arriba había otras tres ventanas.
Miriam vio las vistas desde ahí y ¡sin darse cuenta, apareció una persona
con capucha negra y una especie de cuchillo!
Fue a por ella, sin piedad, aunque Miriam gritó, nadie escuchó.
Desde aquel día no se supo nada más de las 3 niñas, pero todavía si prestas
atención, puedes escuchar a María gritar:
- ¡LA PEOR CASA DEL TERROR!
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